

Mide aproximadamente 0.5 mm de tamaño está presente en el alcohol fermentado y una vez ingerido asciende hasta la nariz y posteriormente hasta el hipotálamo, una vez en ese lugar extiende sus tentáculos hacia las zonas del cerebro que controlan el oído y la voz generando un una dislexia, haciendo casi imposible la comunicación con las personas que tienen como huésped a este ser.
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